Hay dias en los que queriendo, se me quedan las llaves olvidadas dentro y salgo con la intención de no regresar jamás. Pero al final, acabo llamando al cerrajero de urgencia, que encima me clava una pasta.
Hay noches en las que no me importaría dejar de echar la llave a la puerta blindada
y que pase lo que tenga que pasar, que si no pasa le invitaria yo a entrar.
k las llaves dan mucho juego, sino que se lo digan al sereno.
4 comentarios:
lo del sereno tenía tela, era como tener un poli toda la noche a la puerta de tu casa.
en días así, siempre te cruzas con aquella persona de la q te encerrabas xa esconderte. Y desearías tener las llaves q cierran tus puertas, xo entonces te das cuenta de q sólo sabes abrirlas xo nunca aprendiste a cerrarlas, quizá xq nunca quisiste tener q hacerlo...
mi viejo un dia se olvido el auto cerrado, en marcha. tuvimos que llamar al cerrajero para que lo abra. Inusitado. Ya se, no tiene nada que ver
eyyy, poner vuestro nombre o nick después del comment, o antes, o en medio.
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