lunes

EN EL LABERINTO

...y los caminos se bifurcan, y tienes que elegir, no queda tiempo, porque también el tiempo decidió esfumarse, como el vapor de agua después de una tormenta de verano, y estás en este laberinto de gente que sólo te acompaña si tienes la contraseña correcta, la ropa adecuada, el trabajo decente, la pareja estable y el dinero: contante y sonante, y parecemos libres cuando bebemos y fumamos delante del escaparate del k toca enfrente, inalcanzable, dios de música que dura lo que dura la noche, y los bises de propina, y me tengo que creer que somos libres, y tengo que aprender a creer que existe la felicidad en la ciudad de las calles que nunca terminan.

y si no, a volver al inicio, hasta k aprendas.

2 comentarios:

SP dijo...

Hoy leía:
"... Y he aquí el secreto de la felicidad y la virtud: amar lo que hay obligación de hacer. Tal es el fin de todo el acondicionamiento: hacer que cada uno ame el destino social del que no podrá librarse..."

(Aldous Huxley, "Un mundo feliz")

Anónimo dijo...

Para muchos la música es nuestra religión.
un beso oli.
Karme